MIÉRCOLES, ya es mayo a todos los efectos y no pasa nada especial, lo que tampoco es para quejarse. Estamos bien. Y seguimos aquí, en ello.
Dos sugerencias para esta semana:
1) una peli: LADY MACKBETH, dirigido por un debutante, William Oldroyd, es un dramón sin contemplaciones ni personajes buenos que sufren injusticias en los que apoyarse, transcurre en una zona rural en la reprimida época victoriana inglesa, es 1.865, y está basada en una novela rusa (de Leskov) de mediados del XIX.
Una joven, mediante un matrimonio de conveniencia pactado por su padre, llega a la casona -austera más que sobria pero elegante y señorial, y con varias criadas- de una penosa familia terrateniente compuesta por un anciano autoritario, violento, despiadado y machista a más no poder y su inestable, reconcentrado y asimismo enfurecido hijo, el marido de la joven, que menospreciado por su padre y su entorno, muestra tendencias sádicas y revela una personalidad asocial e incomprensible.
A nuestra heroína, poco más que una niña recién llegada a una casa ajena que nunca sentirá suya, los dos hombres, cada uno a su manera, la desprecian y humillan sin mayor motivo, y le obligan a una vida de reclusión, a respetar insoportables y estrictas normas asociadas al «decoro» femenino de esos tiempos, a asumir una vida de tedio y sometimiento que ella no acepta, por lo que aprovechando una circunstancia favorable (un largo viaje de su marido), inicia un radical -y sin red de emergencia- proceso de emancipación que termina en un drama que, no temas, no te hará llorar porque el responsable de esta peli no busca que empatices con ningún personaje, que ya es habilidad. ufff.
Heavy, romántica y trágica, entretenida de ver, muy realista y nada acaramelada, celebradísima por la crítica nacional y mundial y de una belleza formal intachable, está siendo cuestionada por algunos espectadores. Lógico. El esarrollo y, sobre todo, la resolución final del relato deja, además de sorprendido y desconcertado, incómodo, por no decir disgustado al público, y eso digámoslo otra vez, tiene su mérito.
Hasta el moño de lo políticamente correcto y de los finales felices que estamos. Quizá por eso nos gustó tanto LADY MACKBETH. Ah, visualmente es preciosa (el encuadre, la iluminación y la composición de las escenas de interior son alucinantes,casi pictóricas) y el relato, durísimo, árido y concreto a más no poder, sin divagaciones ni pérdidas de tiempo. Que también se agradece, no sobra el tiempo para perderlo en subrayados ni en prolongaciones innecesarias de diálogos o escenas.
Estamos ante una peli diferente pero de verdad. Nos recordó a la inolvidable «Elle» con una Isabelle Hupert de otro mundo, y eso es decir mucho. Florence Pugh, la actriz (nuevo rostro, ya, del cine mundial; y si no, al tiempo) que encarna a la protagonista de LADY MACKBETH roza la perfección, saliendo airosa en unos primeros planos muy comprometidos.
¿Cómo se compone la gestualidad de un rostro y la corporeidad de un físico y de una postura de una niña víctima de insoportables abusos que en su búsqueda de libertad se convierte en una asesina cruel y carente de escrúpulos? Sólo por ver cómo logra Florence Pugh este milagro merece ver LADY MACKBETH .
2) Un disco nuevo de chica, que como es sabido son nuestra debilidad más manifiesta en esto de la music. Se trata del de FEIST, cantautora folk-pop con bastante fama, epítome de lo que se dio en llamar el indie-mainstream (esto es, mitad prestigio y excelencia creativa; y mitad comercialidad y relativo éxito de masas), que vuelve a grabar tras su no muy aplaudido «Metals» de 2.011 pero que no estaba mal. El problema es que con «Let It Die» (2.004) y «Reminder» (2.007= la petó, je.
Feist es canadiense e hija de artistas, por supuesto, canta de maravilla, tiene unos 40 años, y participó, en realidad la formó con otros amigos, en una superbanda de primeros de siglo, Broken Social Scene (le vimos en directo en un Primavera Sound, je, eran el ciento y la madre en escena) pero lleva editados nada menos que siete discos a su nombre.
Feist es una importante estrella indie, que ha colaborado, además de con sus BSS, con José González, Wilco, Peaches, Kings Of Convenience…, tremendo pedigrí tiene, sí, su carrera. Y su nuevo disco mola mucho, y tiene canciones muy diferentes.
Nos quedamos con una de las más rockeras. Feliz miércoles.