Miércoles, VUELVE EL INVIERNO Y VOLVEMOS A VERNOS FORZADOS A LUCHAR CONTRA EL DESÁNIMO QUE ESTE FRÍO Y ESTA LLUVIA TAN FUERA DE TIEMPO Y TAN DESAGRADABLES NOS GENERA, como si no fuera bastante con las noticias que vomita la actualidad, unas malas y las otras, infames. A ver si hoy mismos podemos informar del concierto que podrás disfrutar el viernes que viene, 17 mayo, en tu local favorito, y logramos levantar un poco el ambiente.
Por fortuna, NO ES LO ÚNICO QUE VUELVE. También lo hace (es la segunda vez que la reponen, un gran acierto, además de un hecho insólito) a las carteleras vizcaínas (Golem Alhóndiga, Bilbao) ‘Searching For Sugar Man’, la increíble y emocionantísima historia de Sixto Rodriguez, gran cantautor folk-rock estadounidense de los años 70, sí, en las buenas épocas de Dylan, Neil Young, Johnny Cash y Leonard Cohen, pasó sin pena ni gloria en Estados Unidos (trabajó de obrero de la construcción y reparaciones de edificios), pero se convirtió, sin saberlo, en un ídolo de masas en la aisladísima Sudáfrica del apartheid, cuyos sectores sociales más inquietos y progresistas hicieros suyas las canciones de Rodríguez.
No perdáis la oportunidad de ver esta peli, EN EL CINE, en una buena sala con un gran sonido, a oscuras y sin nadia ni nadie que interrumpa. Hay liturgias que deben respetarse. Porque es una peli acojonante (en realidad, aun siendo un documental se ve como si fuera de ficción, tal es la magia que se crea), porque las canciones son flipantes, porque estám muy bien traducidas, porque te emocionas a tope con la historia, porque este fenómeno de artista es un hombre carne y hueso (hasta el punto de que va a tocar en barcelona dentro de pocos días, en el festival Primavera Sound, con sus 71 años).
Llevamos muchos meses escuchando las canciones de los dos únicos discos que grabó SIXTO RODRÍGUEZ; las pinchamos con frecuencia en La Estación, quizá incluso te suenen de haberlas oído mientras tomabas algo aquí, y hoy os queremos dejar una de las mejores (cuesta elegir, la verdad) deseándoos suerte, y animándoos a pasar del mal tiempo y a concentrarnos en las cosas buenas, por pequeñas que sean, que nos pasan cada día.
¿Una de ellas? Escuchar canciones como esta, himno de libertad y rebelión ante el apartheid en la Sudáfrica que soñaba con la igualdad y la justicia.