Sábado, terminó lo bueno. Han sido tres semanas estupendas, que comenzaron con un concierto espléndido de Damien Rice en Palafrugell, Girona y terminaron con una mágica puesta de Sol en El Rompido, a más de mil kms de distancia.
No hay queja. Todo es dialéctico y adquiere sentido con su opuesto, y con lo que le antecede y sucede.
Así, tras el descanso, los viajes y la diversión vuelve la rutina del trabajo, los horarios a cumplir sí o sí; todo un pack que, no lo neguemos, a veces tiene su punto. Y si no, hay que buscárselo que por algo somos supervivientes sin tacha.
La primera canción que voy a pinchar en el aperitivo de este mediodía en La Estación de Neguri va a ser esta maravilla de temazo de KARL BLAU, «Fallin Rain», que me está alegrando la mañana. Nos vemos si pasas.
No, no es un paraje del Caribe. Cancela Velha queda a media hora de casa (sorry, de El Rompido, Huelva).
Ayer la banda sonora que enriqueció tanto el disfrute del paisaje como el largo paseo playero fue la del dúo californiano SALES, sugerencia de mi tocayo Lezón. Publicaron su primer disco grande, «Sales LP» en 2.016. Parece de hoy mismo, y de hace 20 años también.
Joder, y qué hemos hecho para merecernos esto? Se te olvidan los problemas. Ayer, tras tomar un bar de pirras 😉en el garito más flipante de Getxo, que es…
Un atardecer como el de ayer, pura belleza, te hace hasta creer. Creemos en Leonardo. Hazte el favor, escúchala hasta el final. Trompeta y violín te harán temblar de emoción. Pura belleza, también. Paisajes de interior, en este caso.
Buenos días y mejor desayuno. El mío ha consistido en mala ostia y preocupación por el ataque contra Siria, zumo naranja industrial, naranjas enteras, nueces, café con leche (desnatada, je), tres galletas maría y una magdalena. Feliz sábado, eso por adelantado.
Tremendo ambiente ayer, por cierto, en el acto de presentación de la expo de acuarelas de RICARDO VILLAR en La Estación de Neguri, pese a la lluvia.
Canciones como esta de la estadounidense de Phoenix (Arizona) COURTNEY MARIE ANDREWS (de su nuevo disco «‘May Your Kindness Remain’), aportan luz, ayudan a disipar esas nubes omnipresentes que cada vez nos afectan/intimidan menos, a todo se acostumbra uno. Menos, gracias a Dios, a la sinvergonzonería de los «servidores» públicos.
Cuando compruebas el desempeño vocal de ciertos artistas del mundo country-folk (en realidad, son muchos: ayer pusimos a Grant-Lee Philips) te da por pensar que hay tantos artistas pop que no saben cantar o que carecen absolutamente de una voz no ya capaz de transmitir emoción sino siquiera significativa…, ¿se darán cuenta o es cosa solo nuestra?
En realidad, antes quería poner esta canción que va abajo, pero la que ha quedado al final, «Lift The Lonely From My Heart» tampoco estaba mal, ¿no?. Bueno, va la acoyonante «Rough Around The Edges».
A mi siempre me enseñaron que los problemas que mejor puedes resolver son los que tú mismo, de uno u otro modo, generas. Luego queda la otra parte del problema, en la que tú difícilmente puedes intervenir, pero al desembarazarte de lo tuyo ya te has quitado un peso de encima y has contribuido a resolver el problema; además, te has situado en otro plano, más positivo y empático, para abordarlo.
Creo que esto es aplicable a lo ocurrido ayer en las inmediaciones de San Mamés, con el trágico saldo de una víctima mortal.
Que cada club (comenzando por el Athletic) se haga cargo de la gentuza (ultras, violentos, etc) que provoca, molesta y agrede bajo su bandera. Y que se los quite, de una p. vez, de encima. Cada club, los suyos. Sería un buen comienzo. Puede hacerse, lleva su tiempo pero es posible; algunos clubs lo han logrado, imitémosles.
Empecemos por deshacernos de nuestros propios cafres, que hay mucho trabajo. Quienes gritaban «fascistas» o «hijos de puta» para provocar a los aficionados rivales no creo que fueran rusos. Me suenan, estas imprecaciones, a un idioma más familiar, como más cercano.
Nuestras condolencias a la familia del ertzaina fallecido. Lo que más jode es que todavía hay quien sigue viendo estos incidentes, estas actitudes chulescas, groseras, violentas, xenófobas y fanáticas como un juego, como algo inherente al fenómeno «hincha» del fútbol. Pues no, de ningún modo. Esto hay que erradicarlo, como sea. Está en nuestra mano resolver, al menos, nuestra parte del problema. ¿Cómo se hubiera desarrollado la noche de ayer si los fanáticos del Athletic, (los de aquí, vamos, que no sé yo si esta gentuza ama de verdad al club y a su historia) no hubieran provocado (o entrado al trapo, lo mismo da) a los cafres rusos?
Feliz finde, pese a todo. Os dejo aquí un temazo de THE PALACE OF LIGHT (Iñaki Hanky Panky, ya estás guardándonos un ejemplar, y enhorabuena por la reedición de este discazo de cuya existencia he sabido hace pocos meses, gracias al exquisito trabajo de Hanky Panky Records, je).
—————————————————
Para los amantes de la buena music de los 80s, info añadida:
«THE PALACE OF LIGHT
– BEGINNING HERE AND TRAVELLING OUTWARD –
Expanded edition (2 CD Gatefold card sleeve– HPR 030)
Reedición facturada por el sello bilbaino Hanky Panky Records, en el 30 aniversario de este LP ya clásico de psych-pop, editado en 1987 por Bam Caruso Records. Incluye CD adicional con material no editado anteriormente y una nueva grabación. En 1993, el grupo cambió de nombre a Mabel Joy y publicó el exquisito «Wish I Was», reeditado por Hanky Panky en 2013. Libreto con notas y fotos a cargo de Stewart Lee. Edición limitada de 500 copias. Julio 2017″
Si aguantan los limones, aguantamos nosotros. Al fistro de tiempo que llevamos sufriendo dos meses (la frase del mes: «cuatro grados y llueve en Bilbao; tendencia a empeorar», en la radio, el pasado martes) y al horroroso juego del Athletic esta temporada, como buena muestra el espectáculo de impotencia y ausencia del más mínimo rigor y criterio futbolístico del empate cosechado ayer (no se mereció ganar, qué va) en San Mamés ante el vicecolista y equipo más goleado de la Liga. Con lo que nos afecta el tiempo y el Athletic, llevamos una racha que para qué.
Lo dicho, hay que aguantar y confiar en que las cosas mejorarán (lo del Athletic tiene muy mala pinta: incluso pensamos hoy que Ziganda, cuya dimisión o cese es imprescindible para salir del hoyo, no es el único responsable: la plantilla quizá requiere savia nueva, cambios y relevos, incluso en jugadores que fueron hace no mucho muy importantes, Iturraspe, Raúl García y Rico entre ellos) aunque reflexionando sobre la foto que acabamos de sacar en nuestro pequeño jardín, quede la duda de si sudamos del estrés, si simplemente nos hemos mojado tras el paseo, o si en realidad tenemos goteras por el constipado que (el trato hace el afecto, decía aquél) nos ha cogido cariño y se ha quedado en casa a vivir, para siempre.
En fin, os dejamos con un tema de uno de los discos más lúdicos y amenos de escuchar de lo que llevamos de año, “I Can Feel You Creep Into My Private Life”, lo nuevo de los, más que eclécticos, osados e irreverentes TUNE-YARDS, en el que casi todo tiene cabida (sonidos afro y caribeños, retro 80s, funk, pop, rock, house, disco music…, o sea, una fiesta de categoría)
SÁBADO. Solo nos quedan los jóvenes; nuestra generación, que es la que dirige el mundo, ya ha dejado bien claro lo que da de sí.
Paso a la juventud, que tiene derecho a perseguir la felicidad y el bienestar, a no encontrarse un planeta desquiciado e inhabitable.
Se llama JULIEN BAKER, es de Memphis, Tennessy (EEUU) tiene 22 años, y acaba de publicar su segundo disco largo, una maravilla de escueto folk-rock de autor titulada «Turn Out The Lights». Pero en esto no le hagamos caso: hay que dejar bien encendidas las luces, si creemos en un futuro viable, es necesario que se vea nítidamente la magnitud del desastre. Y es que, no conformes con lo conseguido, seguimos innovando, creando más desgracia, miseria moral e injusticia.
No nos es suficiente con el terrorismo, los chalados armados matando al personal indiscriminadamente, las guerras que nunca acaban, los nacionalismos fanáticos y excluyentes, los populismos demagógicos, la corrupción sistematizada, la precariedad laboral, los atentados al medio ambiente, la explotación de la mujer (¡asco de prostitución!)… la violencia machista y otros horrores de parecido pelaje: en el periódico leemos hoy que en el país que vio nacer a esta joven artista, modelo de prosperidad y democracia para algunos desinformados, se ha detectado un incipiente mercado: el de cadáveres humanos, familiares que venden los cuerpos, en parte o en todo, de sus difuntos para sacar algo de pasta y/o porque no pueden costearse el entierro. ¿Qué estamos haciendo?
Lo dicho, que los jóvenes empiecen ya a tomar cartas en el asunto, el futuro es suyo. Solo nos quedan los jóvenes; nuestra generación, que es la que dirige el mundo, ya ha dejado bien claro lo que da de sí.
Paso a la juventud, que tiene derecho a perseguir la felicidad y el bienestar, a no encontrarse un planeta desquiciado e inhabitable.
Así luce de maravillosa la playa de Comporta, hoy, domingo, 15 octubre. No hemos podido vencer la tentación de acercarnos al paraíso. Son las dos de la tarde. El pescado a la brasa espera en el txiringuito. Unos 30 grados y brisita. No me iría nunca. Y el Athletic ganó ayer. No se puede pedir más, o sí, pero dejémoslo estar. Que mañana es lunes.
Las palabras enormes y las grandes ideas nos han ido quedando cada vez más grandes y ajenas, solo crean guerras, desencuentros, fractura social y tensiones; nuestra patria mas sentida es -y lo es cada vez más- la familia, los amigos, la naturaleza/los paisajes y los recuerdos. Y, cómo no, la music en general y el rock en particular, y dentro de ella, la obra de genios que convirtieron nuestra vida en más grande, emocionante y disfrutable. Todo esto ya nos provee a algunos de un sentimiento de pertenencia suficiente, quizá no haga falta más
Esta pasada noche ha muerto TOM PETTY, víctima de un infarto. Nunca llegó a tocar en España; no llegamos a verle en directo ni lo haremos ya jamás. La última oportunidad viable fue Londres hace pocas semanas, pero no pudimos ir, por motivos bien sencillos. Buenos amigos nuestros hicieron el esfuerzo y le vieron, afortunados ellos. Leemos que «Petty estaba en la recta final de una gran gira para celebrar los 40 años de su carrera junto a la banda de acompañamiento de toda su vida, The Heartbreakers».
Esta canción ha sonado un millón de veces en La Estación de Neguri. Hoy lo hará también, al igual que otras muchas del fantástico repertorio de este icono del rock norteamericano más auténtico y menos rendido a las tentaciones del dinero y la fama.
Horror de comienzo de mes.