Martes, 14 de abril (¿alguien celebra hoy esta fecha, tan reivindicada hace tan solo un par de décadas?), luce el sol e incluso hace calor (lo de ayer fue increíble, 27 grados a la sombra en Zugazarte a las cinco de la tarde) sufrimos un resfriado inoportuno e inclemente y nos disponemos -como la mayoría- buenamente a trabajar un día más.. todo más o menos normal.
Una canción en directo de PHOSPHORESCENT PARA DAR BUEN INICIO AL DÍA.
Os contamos, de paso, que vamos a prolongar unos días más la expo de IÑIGO SARRIÁ, que está gustando mucho a la parroquia; y que el viernes pasado, con dos estupendos jóvenes guitarristas/cantantes, volvió a nuestro local el ambiente de la music en vivo. Y que no estamos sufriendo con EL DEPORTE, porque Alonso siempre nos ha caído regulín y no hace nada para remediarlo, porque la Vuelta al País Vasco la ha ganado uno de nuestros ciclistas favoritos, Purito Rodríguez, y porque, claro que nos disgustan partidos inermes como el del pasado domingo ante el Español pero ya nos esperábamos el pinchazo del ATHLETIC (la grave lesión de Munian es, por cierto, un hachazo de mala suerte), que solo sabe estar, y sin lujos, a una cosa (la final de Copa, tú sabes). Y que nuestra ya casi anacrónica afición a leer periódicos cada día no hace sino sumirnos en la melancolía. Además, se nos mueren los pocos intelectuales de referencia que van quedando (en un solo día, Eduardo Galeano y Günter Grass).
Pues nada, vamos a mover el culo, pasear el perro evitando el sol, que no compagina bien con el resfriado, y sin mayor dilación, a poner cafés en La Estación, que ya te ofrece a lo largo de todo el día las mesas de su soleada terraza, que ha estado llena de gente tomando algo o comiendo/cenando este finde y ayer, lunes.
Os dejamos con un poco de rock americano del bueno, extraído del novísimo disco en directo («at The Music Hall», en la ciudad de Williamsburg) de PHOSPHORESCENT, artista estadounidense (de Georgia es el muchacho) del que ya hemos hablado aquí otras veces. Si Springsteen estuviera en forma, sus canciones (las sentimentales, ojo) sonarían más o menos así, pero no nos hagas mucho caso, porque es lo primero que se nos ha ocurrido.