PUES SÍ, ha llegado definitivamente el otoño, tras un verano gozosamente prorrogado. El ATHLETIC en vía de recuperación, y la música de hoy, un supervídeo, todo el mundo a bailar: sobrenatural concierto de DISCLOSURE, la banda fiestera del momento, en París.
Es ver nacer esta mañana gris y lluviosa, poner la mano encima del radiador de calefacción, hojear el periódico y llevarnos el susto de la nueva y penúltima propuesta soberanista del amigo catalán que renace de sus cenizas haciendo honor a su apellido, o sentir que la realidad se repite una y otra vez tras comprobar el despliegue informativo sobre:
1) la lacra social de la violencia de género
2) el nuevo episodio cruento del conflicto judío/palestino, que nos sitúa en una tesitura dramática: lejos de irse siquiera templando el problema, todo apunta a que aún pueden empeorar las cosas
3) el estallido de ira social en EEUU tras la injusta muerte de un joven negro a manos de un policía blanco y la inacción de la Justicia; parece la repetición de un incidente que, de puro repetido en las últimas décadas, nos sabemos (paso a paso, incluso en sus repercusiones) de memoria
4) el caso de los sacerdotes pederastas de Granada, que confirma que los abusos infligidos a niños por curas no son cosa del pasado
5) la incapacidad de políticos (los de siempre, y ah, sí, también los nuevos, que dicen que pueden pero no revelan cómo piensan lograrlo), sindicalistas, financieros, grandes empresas y dirigentes del entramado socio/económico para afrontar ni la vergonzosa y obscena corrupción ni la inacabable crisis en nuestro país…
… y caer RENDIDOS, víctimas del cansancio, la desesperanza la melancolía y, también, de nuestra tendencia natural a la pausa y a la reflexión improductiva. Pero, felizmente en este caso, somos contradictorios, y tenemos un perfil de gente positiva y con reflejos y actitud para tomar decisiones, con lo que, modestamente, vamos a quedarnos con esos destellos de luz que aportan claridad y optimismo ante tanto nubarrón cafre y desmovilizador.
El ATHLETIC, por fin, HA REACCIONADO y supera, parece que definitivamente (y tarde ya para la Champions, a pesar de la victoria de ayer en Ucrania, estamos eliminados) esa mala racha de juego y resultados que tanto nos preocupaba. No sirve para casi nada esta victoria, pero nos reconcilia (aún más) con nuestro equipo. A por la UEFA, o sea, la Europe League.
Y, como ya le hemos dado la vuelta al pasmo otoñal y estamos casi contentos, como tercer elemento positivo comunicaros solemnemente que, a pesar de lo que podría pensarse si se escucha lo que programan las radiofórmulas, 40TV o la MTV o similares, la (buena) música de baile no ha muerto. Los jóvenes artistas la siguen liando, vaya que sí. Y no todo es discursivo o zafio hip-hop ni machacón y alienante techno/trance. La muestra de esto la tenemos en el video (impecable en lo técnico, también) de un breve concierto de DISCLOSURE, joven banda británica que combina asombrosamente la electrónica con el rock y el techno, con aditamentos soul, funk y todo lo que queráis, para crear un musicón que se goza de lo lindo escuchando tranquilamente pero más aún, moviendo el cuerpo, aunque sea solo/a en tu casita. Ya les podían haber traído a estos como cierre fiestero del BIME celebrado recientemente en el BEC y no a La Roux que (en ese directo, ojo, que su disco nuevo nos gusta bastante) con su sonido en plan lata fue poco menos que un pestiño. Va, un concierto de DISCLOSURE en París que ejemplifica el estimulante e intransferible poderío de la música en directo. Por cierto, ¿queda alguien que sigue preguntándose por qué va tanta gente a los conciertos y a los festivales de rock? Respuesta: este video de DISCLOSURE, no os perdáis un solo minuto, que la parte final es lo mejor.