Ayer, lunes, inauguramos la exposición fotográfica de Juan Boado, en la que destacaban las obras que ofrecían perspectivas imponentes de la torre Iberdrola, y otras con el tema central de la urbe bilbaína. Gran ambiente en la fiesta-lunch, con muchos jóvenes colegas y amigos del autor, circunstancia que aproveché para poner música un poco más moderna e indie de lo habitual. Menos folk, blues y country de lo normal, quiero decir. Pinché canciones de Tennis, Weekend, Ron Sexsmith, The National, Spoon, Arcade Fire, Tindersticks, Magnolia Electric Co., pero por supuesto cayeron otras de Smiths, Rolling, Jaywhaks, Cure, Beach Boys, Willie Wright, The Band, Eilen Jewell, Josh Rouse, Lucinda Williams…, una bonita sesión, creo; pero bueno, es lo que pude hacer en los escasos momentos en que los –afortunadamente- numerosos clientes no requerían de mi atención. Zampa atendía las mesas de los invitados y yo en la barra al público general. Fue una tarde-noche exigente para nosotros, pero muy animada para los asistentes: las caras de satisfacción eran muy numerosas , y nuestra Kronenbourg 1616 de caña se porta perfecta estos días, está buenísima, sabrosa, fresca y agradable. Se pasó bien, de veras. Si te lo perdiste, no será porque no avisamos, ¿eh?.
El pasado viernes tuvimos en concierto en nuestro local a Dead Bronco, que ofrecieron un set impecable, casi perfecto. Rebosante de actitud countryfolk un poco canalla, casi rockabilly en lo estético pero campestre y rudimentario en lo sonoro. Emitieron en mono, con un único altavoz, pero dentro su sencillez sonó superbien, potente y claro. Y la acústica del local, como es habitual, ayudó mucho. Siempre agrada a los artistas y al público, la música en directo suena muy bien en La Estación, que la noche del viernes acogió a una numerosa y entusiasta peña de seguidores del grupo, que aportaron juventud, estética punk-rockera, tatuajes bien hechos y buena marcha al ambiente. Tengo que reconocer que padecimos bastante calor en el interior del local, pero a la vez os informo que estamos dándole vueltas al asunto para resolver el problema, y que lo del aire acondicionado es cosa de pocos días.
Un poco más va a tardar el asunto de la ansiada terraza exterior,
Instalaremos la terraza cuando acabe la obra de reparación de la fachada del edificio y se retiren los andamios que estamos sufriendo desde el mismo mes de diciembre del año pasado cuando abrimos La Estación. Cruzo los dedos para que en julio finalice la obra y podamos ofreceros servicio de terraza, que, os adelanto, va a quedar muy chula y confortable, siempre respetando lo que diga la normativa municipal y atendiendo al bienestar de vecinos y viandantes.
Ah, y no os perdáis el concierto de PETER ABELS este próximo viernes.
Peter Abels es un experimentado cantautor de origen holandés y poderosa voz que se reconoce influido por Syd Barrett, Neil Young, Graham Nash, John Lennon.., y que hará, además de temas propios suyos, versiones de estos grandes iconos de la música popular. Una confidencia: le he pedido que toque varias del hace poco fallecido ex – Pink Floyd, artista genial, irrepetible e imperecedero mucho menos reconocido, en mi opinión, de lo que su obra merece. En particular, le he rogado encarecidamente que toque “Octopus”, publicada en un sencillo en 1969 y una de las dos primeras canciones publicadas por el autor en solitario. Es una de las canciones de Syd Barrett que más me gusta; la escuché por primera vez hace más de 30 años y aún me sé casi de memoria todos sus acordes. Psicodelia de primera, puro viaje interior; y pop de primera, por supuesto. Con lo que ha llovido desde 1969, con la eclosión de maravillosos cantautores que hemos disfrutado estos últimso años… y “Octopus” todavía parece música no ya de hoy, sino de mañana. Los genios, es lo que tienen.
Hasta la próxima, amigos.